Píldoras Anti-Masonería

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lunes, 14 de marzo de 2011

Albert Pike: Estrategia masónica. (90)

Pike diseñó un plan estratégico cuyo cumplimiento llevaría a los líderes masónicos a una III guerra mundial que facilitaría la implantación del Nuevo Orden Mundial.

Fue uno de los fundadores del Antiguo y Aceptado Rito Escocés (AARE) llegando en 1859 a Soberano Gran Comendador. En 1869 se convirtió en uno de los máximos dirigentes del Ku-Klux-Klan. En 1871 escribió un manual (800 páginas): Moral y Dogma del AARE en el que explica cómo la masonería pretende perpetuar el engaño para los grados inferiores sobre los objetivos de Gobierno mundial.

En el capítulo dedicado a los Adeptos (grado 30), Pike describe cómo la masonería diseñó y dirigió en secreto la Revolución Francesa. Se cuenta que Pike fue un satanista seguidor de lo oculto, fue Sumo sacerdote del grupo Luciferino conocido como Orden Paladiana, fundada (1737) en París.

Isaac Long compró (1801) una estatua de Baphomet (Satán) para Charleston (Carolina del Sur) que está en la latitud 33 grados norte al igual que el templo de Salomón, así contribuyó a establecer el Rito Escocés. Pike, como sucesor de Longe, cambió el nombre de la Orden de Charleston a Nuevo y Reformado Rito Paladiano.

El ministro luterano suizo Walter fue la mano derecha de Pike en Europa y trabajó con Mazzini, masón de grado 33, cabeza europea en los Illuminati (1834) y lugarteniente de Garibaldi que conquistó Sicilia y Nápoles, unificando Italia bajo la monarquía de Víctor Manuel de Saboya.

Mazzini con Lord Palmerston y Von Bismark (masones grado 33) emplearon el Rito Paladiano para establecer una conexión transversal y unir todas las Logias en una estrategia común.

Adam Weishaupt creó la “Orden de los Perfectibles” el 1 de Mayo de 1776 (hoy fiesta del Trabajo). La Orden fue conocida más tarde como los “Illuminati” porque están al servicio del “Portador de la Luz” (Lucifer). Cuando los “Illuminati” fueron perseguidos se incorporaron a sociedades secretas, infiltrándose en las logias para sobrevivir. Crearon un súper-rito que sólo conocerán los masones de más alto grado que dirigirán la más poderosa plataforma internacional de poder político.

Cuando Mazzini falleció (1872), Pike nombró a Lemmi (masón grado 33), banquero de Florencia, como encargado de financiar a Garibaldi.

Las actividades revolucionarias de los “Illuminati” (Lenin, Trotsky y Stalin) fueron financiadas por banqueros de Inglaterra, Francia, Alemania y USA bajo control de la Casa Rotschild. El plan estratégico para alcanzar el Nuevo Orden Mundial mediante tres guerras mundiales está detallado en las cartas de Pike a Mazzini; fueron publicadas (1925) gracias a un masón renegado que informó al cardenal chileno Jose María Caro. Dichas cartas podrían demostrar una gran capacidad de profecía, a no ser porque realmente existe un Poder en la Sombra que maneja los hilos de la política mundial. En síntesis, las cartas contienen una “Hoja de Ruta”:

La I guerra mundial debe librarse para derrocar el poder de los zares en Rusia, que será transformada en la fortaleza del comunismo ateo. Se aprovecharán las diferencias entre alemanes y británicos para provocar la guerra. La II guerra mundial se deberá fomentar tomando como pretexto las diferencias entre totalitarios y sionistas, al objeto de poder establecer el estado de Israel en Palestina. Se constituirá una Internacional comunista atea para debilitar el Cristianismo. La III guerra mundial deberá ser provocada por agentes “Illuminati” que fomenten la secular enemistad de musulmanes y judíos.

Finalmente, los pueblos abandonarán el Cristianismo y el Ateismo, recibiendo la verdadera luz de Lucifer.

Fuente: Manuel Galiana. El Nuevo Orden Mundial. Chronica 2010